Su técnica combina el ultrasonido con compresas químicas, plantillas… que optimizan la circulación sanguínea y linfática y, en consecuencia, eliminan de manera definitiva la desagradable “piel de naranja”. Este tratamiento médico lo ideó el padre de Pita, quien era cardiólogo.
Si bien, Guadalupe Villagordoa Villalobos, estudió administración de expresasen la Universidad Anáhuac del Sur, su vida profesional cambió de rumbo gracias a la influencia de su padre el doctor especializado en cardiología Guillermo Villagordoa Lozano (Pita es la menos de cinco hijos que tuvo el médico con su esposa Alma Villalobos.)
-“Mi papá siempre propició que mi hermana Hanna y yo fuéramos muy independientes. Por tal motivo nos dejó la mejor herencia que pudo habernos legado: los recursos necesarios para trabajar.”
Todo inició, refiere, cuando muchas de las pacientes de su papá llegaban a su consultorio aquejadas de moretones ocasionados por masajes, los cuales él consideraba perjudiciales para la circulación sanguínea. Por eso, después de tres años de exhaustiva investigación y de 17 años de práctica, creó un tratamiento médico consistente en optimizar la circulación sanguínea y linfática mediante el ultrasonido, además de la aplicación de compresas químicas y plantillas; para mejorar la calidad de vida de sus pacientes.
En aquel tiempo, Pita y Hanna lo ayudaban a aplicar la terapia, de hecho fueron sus discípulas durante 15 años. Al darse cuenta de que el tratamiento reducía medidas y celulitis, ella decidió enfocarlo para fines estéticos.
-“No es un tratamiento más” -advierte-, ya que resuelve el problema de raíz. En apenas tres semanas (el proceso consta de 15 sesiones de 45 minutos cada una) te liberas de la famosa piel de naranja. Además tu cuerpo se moldea, te sientes más relajada, duermes mejor, tu piel se suaviza y en caso de que padezcas migraña y estrés, éstos se reducen significativamente.
ARTÍCULO DE LA REVISTA ACTUAL.